miércoles, 30 de junio de 2010

“Octubre” Milagroso

José Romero logró contactarse con los cineastas peruanos del momento: los hermanos Daniel y Diego Vega, flamantes ganadores del Premio del Jurado en la Sección “Una Cierta Mirada” del Festival de Cannes gracias a su ópera prima, Octubre. Entrevista exclusiva para el blog de godard!


¿Cuál fue su reacción al recibir la invitación para participar en el festival de Cannes?

Diego: Primero sorpresa y después alivio. Sorpresa porque nunca se me pasó por la cabeza que podían elegir la película en Cannes. Alivio porque tras siete años con el proyecto en la cabeza, con esta noticia se nos confirmaba que el ciclo del proyecto iba a cerrarse por fin, y mucho mejor de lo que pensamos.

¿Tenían planificado conocer a tal director o ver una película en especial? ¿Lo lograron?

Diego: No tenía planeado ver a ningún director en particular. Quería ver la película de Takeshi Kitano pero casi no pude ver películas. En realidad me puse tan nervioso con la selección y con la cantidad de cosas que nos pedían, entre copias en 35mm, subtitulados en francés, inglés, material gráfico, traducciones de todos los textos, organizar los viajes, etc., que ni revisé el catálogo con calma antes de ir al festival. Estuvimos seis noches ahí y fueron días de intenso trabajo.

Daniel: Realmente no tenía mucha idea cómo funcionaba el Festival. Llegué la noche antes de la premiere de “Octubre” y desde el día siguiente en la mañana hasta el sábado antes de la premiación sólo nos dedicamos a trabajar. Y fue positivo porque significó que la película llamó la atención. El sábado pudimos ver la primera película (la que ganó Una Cierta Mirada) y el domingo vi dos.

¿Les pareció extraño o al menos curioso competir al lado de maestros como Jean-Luc Godard o Manoel de Oliveira?

Diego: Al comienzo es muy extraño ver tu nombre ahí pero después tienes que asumir esa realidad que al principio parece una dimensión paralela. No conversé ni vi a ninguno de los dos. Cuando llegamos al festival Oliveira había estrenado su película y ya se había ido. Godard había mandado un mensaje público anunciando que no iba a ir al festival por un "problema griego".

¿Qué les pareció lo más "alucinante" de estar participando en una de las principales competencias del certamen?, dado que anteriormente ya habían ido con su corto "Interior Bajo Izquierda", pero con un perfil mucho más discreto.

Diego: Aunque la primera experiencia fue mucho más relajada y nadie me hizo caso, pude comprobar la magnitud de ese evento. Durante el Festival de Cannes se organiza el mercado de películas más grande del mundo (Marché du Film), se firman contratos de venta de películas en las mesas de los stands, el público acude masivamente al cine, hay miles de fotógrafos acreditados, aparte de la sección oficial y las secciones paralelas (Quincena de los Realizadores y Semana de la Crítica), se organizan proyecciones en cines de Cannes de películas de todo tipo para su posible venta. También se organiza Cannes Classics en la playa (pantallas gigantes en la playa de clásicos en blanco y negro), hay decenas de fiestas cada noche, miles de reuniones, restaurantes llenos todo el tiempo, etc. Todo esto que ya lo pude comprobar durante mi primera experiencia, lo viví en la segunda experiencia desde adentro y puede llegar a ser muy estresante. Lo que me impresionó mucho es ver como están establecidas las jerarquías durante el festival.

Daniel: Diego fue al Short Film Corner donde, según tengo entendido, pagas una cuota y asistes. No existe selección, según creo. Van miles de cortos. Diego me contó que llegó sin ningún material y en una pared había posters de cortos pegados (ahora sé dónde fue). Imprimió unos cuantos y los pegó en espacios libres. En la tarde o al día siguiente, la gente había arrancado los posters nuestros y pegado los suyos. Diego desistió de cualquier tipo de lucha (cosa que yo hubiese hecho de la misma manera) y se dedicó a ver películas. La diferencia es que los posters esta vez nos los pidieron y nadie los arrancaba de la pared.

¿Qué hay de cierto en que fueron tratados como celebridades del séptimo arte?

Diego: La organización del Festival de Cannes nos trató de manera muy amable. La sección Un Certain Regard es una sección muy respetada y mucho más "discreta", donde los estrenos no son tan pomposos ni glamorosos como los de la competición. La sala de proyección Debussy es hermosa, la pantalla es espectacular, la acústica impresionante. De hecho tengo entendido que a Godard le gusta que sus películas se proyecten en Debussy y no en la sala Lumière porque le gusta más la primera. Uno se siente bien con el trato que recibes, porque la gente te agradece por haber hecho una película, te la comentan, es como si te conocieran.

Daniel: La gente de la sección fue muy amable. Con alguno hemos trabado una buena amistad. Lo que me daba más gusto es que de repente estaba caminando por la calle y un par de personas nos reconocían, se acercaba y nos hacían un "thumbs up" o nos decían "¡felicitaciones!". El cariño de la gente fue lo más lindo, gracias a la buena acogida que tuvo la película.

Cuéntenme cómo fue el instante previo a esa primera proyección.

Diego: Lo que se organiza en torno a la primera proyección me hizo pensar (salvando las distancias y con sus diferencias) en el momento cuando los boxeadores salen del camerino y entran en el ring. Nos reunimos en la sala de la sección con algunos amigos, invitados, la gente del equipo que estaba presente, personas de la organización de Un Certain Regard, personas que nos estuvieron apoyando durante todo el festival de la Cooperación Andina Regional de la Embajada de Francia, el equipo encargado de ventas internacionales (UMEDIA), pero no éramos muchos. Después de brindar, todos fuimos a la sala en fila con nosotros dos por delante como marcaba el protocolo, después subes las escaleras rojas pero no hay mucha gente porque nadie nos conoce, te tomas unas fotos (la mayoría de gente que conoces), de ahí entras a la sala que ya está llena, y una vez ahí anuncian tus nombres. Dimos un discurso muy breve y nos sentamos a ver la película. Todo el día de la primera proyección lo pasé nervioso, pero hacia el final cuando la película estaba por terminar el corazón me estaba reventando y me sudaban las manos. Porque te pueden abuchear, aplaudir o irse en silencio. Había unas mil ochenta personas en la sala según leí en alguna parte.

Al terminar la proyección, ¿estaban ustedes esperando recoger las impresiones del público?, ¿cómo reaccionó?, ¿hubo aplausos?

Diego: Durante la proyección la gente reaccionó más de lo que yo pensaba. Interactuó mucho con la película y eso es bueno. Después de tantos meses de ver una y otra vez la película yo ya había perdido referencia y no me emocionaba nada de la película. Cada vez que la veía me deprimía. Escuchar a la gente reaccionar y reírse me hizo sentir muy bien. Lograr que la gente reaccione es algo extraordinario. Al final hubo varios minutos de aplausos, y después, cuando salimos de la sala, había gente esperándonos para seguir aplaudiendo. Fue un momento muy gratificante.

Daniel: Yo estaba muy nervioso. Descubrí que tiendo a zapatear. Me fui tranquilizando a medida que escuchaba las reacciones de la gente a la película. Sobre todo las risas. Finalmente, los segundos después de que termina, esos segundos donde la gente da su veredicto fueron muy intensos. Cuando empezaron los aplausos fue un alivio. Luego nos pusieron una luz directa y nos hicieron poner de pie. Los aplausos continuaron durante algunos minutos. Fue un momento emocionante. Inclusive después, cuando salimos de la sala, en el hall, la gente nos esperó y siguió aplaudiendo, se tomaban fotos con nosotros, nos felicitaban, fue liberador. Finalmente, el trabajo que has hecho con tanto esfuerzo, y que finalmente está hecho para el público, fue aprobado. Descubrí que no estaba loco porque al final, con la película ya lista, yo era el único que me reía.


¿Con qué rapidez se dieron a conocer los primeros comentarios o críticas sobre “Octubre”?

Diego: Las reacciones son automáticas, primero de la gente que acaba de ver la película o de algún distribuidor que estaba esperando la reacción del público para comprarla. Al día siguiente salen las críticas y empieza el boca a boca. Por ejemplo –no lo sabía–, la crítica de Variety es muy esperada y es una referencia para los distribuidores y para mucha gente.

Al conocer los comentarios positivos de la prensa, ¿pasaba por sus cabezas la idea de ganar algún premio?

Diego: Intentaba no pensar en eso pero, ¿a quién no se le pasa por la cabeza?

¿Lograron conocer a alguien del jurado de su sección? ¿Conversaron o les comentaron algo de su película?

Diego: Los conocí el día de la premiación. Intercambié algunos comentarios con Claire
Denis, quien nos hizo saber que le había emocionado mucho la película.

Sinceramente, ¿les sorprendió ganar el premio? Al día siguiente, ¿acariciaban la idea de ganar la Cámara de Oro?

Diego: Me sorprendió aunque había habido buenos comentarios y la posibilidad existía. Pero al día siguiente no acaricié la idea de ganar La Cámara de Oro porque, como digo, suelen haber rumores que te pueden hacer pensar que puedes ganar y éste no era el caso.

Habiendo transcurrido varios días de la premiación, ¿cómo consideran la experiencia de aquellos agitados días vividos en Cannes?

Diego: Creo que tuvimos mucha suerte en ser seleccionados. Hay muchas películas buenas por todo el mundo, muchas de ellas primeras películas también. Hay que ser conscientes que también hay un elemento importante que es la suerte. Siento mucha satisfacción y la idea es seguir trabajando para intentar hacer más películas.

Daniel: Pienso que tal vez otro jurado no nos hubiese premiado. Existe esa posibilidad. En esto del cine, prima lo subjetivo y es algo que he ido aprendiendo mientras presentábamos el proyecto a los fondos. Nada te asegura una selección o que te otorguen un fondo. Pero definitivamente tienes que querer mucho lo que haces y confiar plenamente en ello.

¿Te pasó algo curioso o alguna anécdota mientras estuviste en Cannes?

Diego: No sé si sea una gran anécdota pero Héctor Gálvez me dijo en broma que si veía al "tío Kiarostami" en Cannes le dijera que en Lima tenía un gran admirador. La última noche en una comida donde estaban todos los directores, jurados, actores, actrices, organización, distribuidores, también estaba Kiarostami deambulando por las mesas abarrotadas de comida. Recordé el mensaje de Héctor y me pareció una buena razón para acercarme y eso que salvo por un par de películas que he visto, no conozco su cine en profundidad. Me presenté y me sorprendió porque me dijo que había escuchado cosas buenas de "Octubre" pero que no había podido verla. Yo le dije que no estaba ahí para hablar de "Octubre" sino que le traía un mensaje desde Lima de Héctor Gálvez, un director peruano que había hecho una película muy buena titulada "Paraíso" cuya existencia quizás también se debía en parte gracias a él. Kiarostami sonrió agradecido y después de estrecharme la mano y decirme que lamentablemente no la había visto, siguió deambulando por las mesas de comida.

Daniel: Yo me le acerqué a Gael García porque conocí a alguna de las personas que trabajan en su productora Canana y quería saber si seguían, así como excusa, abrir una posibilidad de algo en el futuro. Le estreché la mano y me presenté. Me vio y me soltó: “¡Felicidades cabrón!” (por el premio de Una Cierta Mirada). Me hizo mucha gracia lo sencillo que es. Después mi mujer estuvo renegando que no le avisé para que se tome una foto con él.

¿A cuántos países se ha vendido la película? ¿Quién será el primer país que la estrenará?

Diego: Hasta la fecha la película se ha vendido a Canadá, Francia, Alemania, Austria y Suiza. Creo que el estreno puede que coincida en un par de países a la vez, pero no lo sé.

¿Cuál fue el presupuesto exacto de la película?

Diego: 250 mil dólares.

¿Limitó o condicionó en algo que “Octubre” fuera una coproducción?

Diego: "Octubre" es una coproducción para Ibermedia con Venezuela y España. La coproducción no condicionó en nada nuestra propuesta de realización ni el guión.

De aquí en adelante, ¿“Octubre” tiene asegurada su presencia en otros festivales?

Diego: Hay algunos festivales importantes que nos han invitado tras la selección en Cannes y en otros estamos esperando respuesta. Pero todavía nada se ha hecho oficial.

¿Que expectativas tienen con el estreno local? ¿Qué factores van a tener en cuenta a la hora de elegir la fecha de estreno? Hay que tener en cuenta que muchas películas nacionales son estrenadas de mal modo, digamos, sin publicidad o lo que es peor en temporada plagada de los llamados blockbusters.

Diego: Tengo mucha curiosidad por ver si el espectador peruano se emociona, y ver su reacción en alguna situación en particular. La fecha de estreno parece que será en octubre y no sólo por el título de la película, sino que está condicionada por el mundial de fútbol (parece ser que sería un error estrenar en estas fechas), julio es temporada de estreno de blockbusters con mucha prensa y publicidad, y en agosto se estrena "Contracorriente" y existe un acuerdo tácito entre realizadores y productores peruanos para no estrenar dentro de lo posible dos películas peruanas al mismo tiempo. De ahí viene septiembre, con lo que si esperamos un poco por el título parece que octubre será el mes indicado.

Críticas

Algunos meses atrás hicimos una convocatoria invitando a nuestros lectores a enviarnos críticas de películas de estreno. Les mostramos algunas de ellas y reiteramos nuestro interés de seguir promocionando nuevas plumas. Los interesados pueden escribirnos a revista.godard@gmail.com

El Libro de los Secretos



Un hombre camina, con extraña determinación, hacia el oeste. Nos encontramos en medio de un futuro ciertamente post apocalíptico, donde la vida se abre camino a duras penas. El personaje, de nombre Eli (Denzel Washington), lleva consigo un libro que podría significar una esperanza para la decadente raza humana. Sin embargo, éste le será disputado por el personaje de Carnegie (Gary Oldman), quien lo desea para expandir sus dominios. Lo peculiar radica en que el mencionado libro tiene claras implicancias religiosas que se irán develando. Este es el argumento de El Libro de los Secretos, cinta de aventuras y ciencia ficción, de los hermanos Albert y Allen Hughes. El filme mezcla diferentes elementos estéticos y temáticos, pero sin conseguir resultados del todo satisfactorios.

Los hermanos Hughes plantean un futuro donde las guerras del hombre han terminado por destruir la capa de ozono, lo que significa que el inclemente sol dificulta las condiciones de vida y la proliferación de terrenos fértiles. De esta manera, el desierto se convierte en un paisaje común en el filme, las tonalidades de la arena y la polución se asientan en la paleta de colores. A partir de aquí se construye la idea del héroe solitario en medio del paraje agreste, al cual se agregarán tópicos como el de las pandillas de bandidos o el del pueblito polvoriento. El Libro de los Secretos se alimenta del imaginario del western. Ahora bien, vale decir que a nivel estético no se encuentran influencias de ese tipo de películas.

Y es que podemos notar referentes más recientes en este trabajo de los Hughes. Encontramos algunos momentos que recuerdan a películas como Matrix o Mad Max, pero lamentablemente estas influencias no son asimiladas. Sucede que la cinta da la impresión de ser un pequeño compilado de los tratamientos visuales de aquellos filmes. Acá radica uno de los problemas de El Libro de los Secretos, que solo se limita al empleo efectista de estas estéticas. No hay mayor inventiva, solo repetición. Sí hay, en cambio y para mal, un pretendido esteticismo cool.

Más interesante resulta el tema que se desarrolla al interior del filme, aunque no sea resuelto de la forma más adecuada. El personaje interpretado por Gary Oldman ve en el libro y en su contenido religioso un instrumento de dominación, que agrupa a los hombres bajo un poder. Es la religión vista en su lado oscuro. Así, se propone una temática rica en diferentes matices, pero que no es explotada adecuadamente por los realizadores. Tal vez, por un guión con inconsistencias. La cinta termina naufragando y no llega a cuajar en ninguno de sus aspectos, ni estéticos ni temáticos. Se queda en el pastiche de ciencia ficción.

Italo Corvetto Schenone


Querido John


Había una vez, en una playa de Carolina del Norte, un muelle dentro de un atardecer, un joven llamado John Tyree (Channing Tatum) y una generosa jovencita llamada Savannah Curtis (Amanda Seyfried). John, desde el muelle, está mirando el mar cuando, de repente, el destino los unirá: el bolso de Savannah ha caído al agua, y John, fuerte, valiente y soldado, rescatará aquel objeto que, según Savannah, contiene su vida. Entonces, ella le dará las gracias, empezará la amistad (o, mejor dicho, el coqueteo), y luego vendrá el romance y la pronta separación.

Lasse Hallström nos cuenta una historia de amor entre un soldado y una joven estudiante, una relación a distancia (ya que él tiene que terminar todavía un año de servicio en el ejército) que se desarrolla en base a cartas. Los acontecimientos del once de setiembre, sin embargo, harán que John tenga que elegir entre volver a casa y quedarse con la mujer que ama o permanecer dos años más sirviendo en el ejercito.

Esta película, basada en la novela de Nicholas Sparks, ha destronado en los EE.UU. a Avatar de James Cameron. Sin mucha acción ni empalagoso sentimentalismo, la historia se torna interesante con la presencia del padre de John, Mr. Tyree (Richard Jenkins), quien se muestra distante y silencioso, abandonado y autista; logrando romper por momentos con la linealidad de la película. Y aunque la narración del film empieza desde un hecho ocurrido en un tiempo en presente de la historia (cuando John es herido), y es contada desde ese hecho hacia atrás, no hay realmente un punto álgido o un factor sorpresa cuando nos damos cuenta de que se ha llegado a la parte donde inicia la película. Por otro lado, es interesante el tema de las cartas, ya que le da un toque de romanticismo en sí. En la historia se explica indirectamente esto: John, como miembro del ejército, es destacado a lugares donde a veces las vías de comunicación son escasas.

Querido John es una historia simple con un final que no necesariamente complace a un espectador que quiere ver una historia romántica con un happy ending. Si bien su nostálgica mirada, su aire juvenil, la playa, el muelle, el atardecer, o la valiosa colección de monedas de Mr. Tyree no hacen de esta película una genialidad, por momentos cumple y logra entretenernos.

Jacqueline Reyes

Me Enamoré en París


El film de Christophe Barratier, el mismo director de Los Coristas, nos transporta a 1936, época de tensiones sociopolíticas de una clase obrera que lucha por sus derechos en medio de protestas sindicalistas. Nos situamos en Faubourg, barrio parisino habitado por huelguistas proletarios, donde se encuentra el Chansonia, teatro music-hall. El Chansonia es súbitamente “tomado” y cerrado por Galapiat (Bernard - Pierre Donnadieu), quien representa al fascismo; pero los ex trabajadores del teatro, liderados por Pigoil (Gérard Jugnot), Jacky Jacquet (Kad Merad) y Milou (Clovis Cornillac) –tres amigos de tablas–, deciden resucitarlo contra viento y marea.

Las claves de fotografía e iluminación claro obscuras, las texturas cenizas, ligeramente sepias, y una excelente banda sonora que emana constantemente una fragancia romántica del teatro y de las calles de Faubourg nos hacen testigos del esfuerzo de Pigoil por salir adelante, un personaje con vaivenes y depresiones que representa a un padre cuya familia ha sido fragmentada, pero que apuesta el cien por ciento de su historia de vida por la dirección del teatro.

Un guión que, sin ser ambicioso para el contexto sociopolítico, narra en forma simple y amena las historias que se cuentan detrás del telón del Chansonia. Romance, drama y comedia se combinan para matizar una atmósfera con un cierto tinte depresivo, y que al mismo tiempo busca constantemente iluminarse de color, amistad, amor, dulzura, y brillo. Por ello, el personaje delicado, y a la vez valiente, de Douce (Nora Arnezeder), la joven cantante, atracción principal del show, es la pieza clave que desata los éxitos y fracasos del proyecto, y además las pasiones desenfrenadas del maduro Galapiat, quien lucha hasta el cansancio por ella contra el revolucionario Milou, personaje belicoso que representa al proletariado vigilante ante cualquier amenaza fascista.

Milou, Pigoil, Jacky y Galapiat, desde su propia caracterización, aportan constantemente a la historia. Los tres primeros personajes se complementan entre sí en medio de la atmósfera de tensión social; es decir, su amistad se fortalece a pesar de las circunstancias adversas y sacan adelante su proyecto de vida: el Chansonia; mientras que Galapiat, con todas sus artimañas y cambalaches para desbaratar los planes de los tres amigos, es el incentivo para que ellos se aferren aun más a sus sueños.

Milagros Neyra


Los Puentes de San Luis Rey


Cinco personas mueren, al caer un puente, en el Perú colonial del siglo XVIII. Juniper (Gabriel Byrne), monje franciscano, inicia una investigación sobre las víctimas, para responder una pregunta que también es signo de aquellos tiempos –en los que una modernidad tardía hacía su tímido ingreso a las Américas–: ¿voluntad divina, o azar?

Esta es la premisa sobre la que descansa Los Puentes de San Luis Rey (2005), dirigida por Mary McGuckian, con guión adaptado de la novela, del mismo título, del premio Pulitzer Thornton Wilder. La respuesta del monje parte de una serie de hechos biográficos que se superponen, se dislocan, se entrecruzan y acaban –fatalmente– en un destino común. Estamos ante personajes “históricos” que ayudaron a construir cotilleo limeño que se extiende hasta los días de hoy, como el Virrey Manuel Amat y Juniet (F. Abraham Murray) y su Michaela Villegas y Hurtado “La Perricholi” (Pilar López de Ayala); personajes mayormente “funcionales” que ayudan a consolidar el universo social propio de un territorio tan pintoresco como sus camélidos: la adinerada, atormentada y culposa Marquesa (Kathy Bates), el empresario de espectáculos Tío Pío (Harvey Keitel) y los hermanos Polish, par de interesantes freaks de perfil más bien posmoderno. Lamentablemente, se abre un espacio demasiado dilatado entre la presentación de estas vidas “paralelas”, y la pregunta planteada por el protagonista, vacío que no logra colmar ni el reparto estelar, ni la evolución de la investigación.

Aunque Juniper no lo exprese manifiestamente –no es capaz de sostener, con firmeza, una declaración categórica–, su respuesta es profundamente materialista, ya que apela a la “historia”, la de los individuos, no la de las estructuras sociales o políticas (¿por qué el franciscano no habrá preguntado por el mantenimiento del puente a cargo de algún poder estatal de la época?). Así lo entienden el Arzobispo (Robert de Niro), como el Virrey –por lo que al monje no le esperará la mejor de las suertes una vez terminado el juicio donde expone sus teorías.

En el filme de McGuckian, la especulación, pretendidamente metafísica, sobre la causa de los hechos, naufraga en una presentación, más bien contemporánea, de historias mínimas, sin lograr, con ello, dar una idea cabal de esa modernidad en proceso de aparición. Cinta errática, con actuaciones de oficio y ambientación de época pretendidamente acuciosa, Los Puentes de San Luis Rey no solo falla en su estructura, sino también en la intención de reflexionar sobre una pregunta que introduce a una nueva era.

Luis Dávalos

Caso 39


¿Qué tipo de emoción es esa que se abre, y a la vez encuentra su pasado? ¿Aquella que juega con alucinaciones e ilusiones? ¿Aquella que juega con nuestra conciencia interna y externa y sólo da una opción para no perderse o simplemente encontrarse?


Chistian Alvart, en Caso 39, muestra personajes alrededor de una historia cuyo parecido con la realidad no es solo coincidencia. Intriga, suspenso y, finalmente, terror son el contrapunto perfecto para un guión que va mostrando contextos disfuncionales hasta llegar a lo terrorífico. Alvart persigue a sus personajes a través de la cámara agregando tensión y capturando a un espectador que trata de entender qué es lo tenebroso. Y lo hace con Emily Jenkins (Renée Zellweger), quien trabaja para el servicio social del gobierno y está acostumbrada a lidiar con familias disfuncionales y abusos infantiles. Al recibir el caso 39, en el cual, aparentemente, una niña de 10 años llamada Lilith Sullivan (Jodelle Ferland) es maltratada por sus padres, Jenkins, intuitivamente, sigue el caso confirmando uno de sus miedos más profundos. Emily es un personaje que desea hacer lo correcto y que sabe llegar a la niña, como en la escena en la que la hace reír al tomarse equivocadamente el agua del bebedero. Pero pronto comprenderá que aquella niña ansiosa y temerosa no es el efecto de aquel entorno, sino la causa. Muertes desconcertantes y aparentes suicidios rodean a la pequeña, y es cuando parece que el terror puede ser ficción y realidad. Lilith tiene el poder de hacer que los miedos maten.

Caso 39 es una película que se deja ver, a pesar de que muestra algunas similitudes con otros del mismo género, como el hecho de que la mayoría de las víctimas mueran sentenciadas por una llamada telefónica, o que el mal sea representado por una niña. Sin embargo, nos libra de escenas demasiado sangrientas, de mujeres asesinadas tras momentos eróticos, de monstruos o psicópatas que nunca llegan a matar a la dulce protagonista. Lo que le importa a Alvart es presentar el miedo como un personaje y no como el resultado de alguna acción. Entonces, ¿cuál es el antídoto que tiene Emily para sobrevivir?, ¿qué tipo de emoción es esa que se abre y a la vez encuentra su pasado? Tal vez solo sea aquella que finalmente nos libera.

Jacqueline Reyes

* Lea más críticas de estrenos en la edición N° 24 de godard!

viernes, 25 de junio de 2010

Ya Salió Godard! N°24

Como ocurre cada tres meses, es hora de anunciar el lanzamiento de una nueva edición de godard!, la revista de cine más comentada en el Perú.

Finalizó la espera para los cinéfilos locales: ya está a la venta la edición N° 24 de godard!, publicación especializada que comenta lo más destacado de la cartelera comercial y del circuito alternativo. Para no perder la costumbre, la portada está dedicada a un próximo estreno: “El Último Maestro del Aire” de M. Night Shyamalan, película basada en una popular serie de dibujos animados que los editores de la revista aguardan con ansiedad. El Especial de “El Último Maestro del Aire” se complementa con un dossier sobre cine familiar, una selección de las mejores cintas apta para todos que no llegaron al Perú.


Siempre rescatando el mejor cine que se hace en el mundo, godard! consagra su sección Ranking a las Mejores Películas de la Década que no llegaron a los multicines. Participaron en la encuesta 15 críticos de cine, entre redactores y amigos de la revista, resultando elegida “Crónica de un Asesino en Serie” del coreano Bong Joo-Ho como el filme más votado de los últimos 10 años.

La sección Filmografía siempre está reservada a la obra de un cineasta importante, en este caso rendimos homenaje al maestro francés Eric Rohmer, fallecido el pasado enero. Desde su ópera prima “El Signo de Leo” (1959), hasta “El Romance de Astrea y Celadón” (2007), pasando por los Cuentos Morales y el Ciclo de las Cuatro Estaciones, Rohmer dejó varias obras maestras, configurando un cine intimista y coloquial donde “la solemnidad cedió ante una comedia humana más profunda y dramática que las habituales”.

Otros temas de interés son la cobertura del Festival de Cine Independiente de Buenos Aires, la sección Expediente con un repaso exhaustivo por las películas que se han atrevido a hablar de fútbol, Cine Español con el redescubrimiento de Narciso Ibáñez Serrador, autor de apenas dos largometrajes pero considerado un maestro del terror, Cine Peruano con la entrevista a Rafael Arévalo, cineasta independiente que llamó la atención con “Alienados”.

Tampoco podían faltar nuestra sección de Crítica con películas que aún están en los cines, por ejemplo “Loco Corazón”, y otros filmes que han causado un fuerte impacto, como es el caso de “Los Amantes”, “Criatura de la Noche” y “La Isla Siniestra”.

PUNTOS DE VENTA
Supermercados
Wong, Metro, Tottus.
Librerías
Zeta Bookstore, Crisol, La Familia, Contracultura, La Casa Verde, Época, Café Britt, librería PUCP.
Quioscos de Lima y provincias.

ENCUÉNTRANOS TAMBIÉN EN FACEBOOK

miércoles, 23 de junio de 2010

Suscríbete a Godard! y recibe la edición de junio


Suscríbete hoy a godard! y recibe en tu domicilio la nueva edición de junio.

Además gana una invitación doble para nuestra próxima función de suscriptores. Disfruta de estos y otros beneficios por tan sólo S/.45 al año.

Escríbenos a suscripciones.godard@gmail.com o llámanos al 431-9079, 990-085-094.

jueves, 10 de junio de 2010

Gana entradas para el Avant Premier de "La Hermandad"


Promocíón: Avant Premier de "La Hermandad"

Suscríbete hoy a godard! y gana un pase doble para la Avant Premier de "La Hermandad", película de vampiros con Ethan Hawke. Para más información, escríbenos a suscripciones.godard@gmail.com o llámanos al 431-9079 o 990-085-094. Promoción válida hasta el lunes 21 de junio.

viernes, 4 de junio de 2010

Ciclo de películas: Los Mundiales en el Cines

En la temporada de la Copa del Mundo, la Asociación Cultural Peruano Británica presenta un ciclo de películas relacionadas con la más grande fiesta deportiva.

Entre el 11 de junio y el 11 de julio se realizará el evento más esperado del año: la Copa Mundial de Fútbol. Los ojos del mundo estarán puestos en Sudáfrica, país anfitrión que recibe a las 32 selecciones participantes. El cine no ha sido ajeno a estas festividades y muchas veces se ha inspirado en las hazañas de los jugadores (“El Partido de sus Vidas”) o en el fervor de los aficionados que esperan salir campeones (“La Gran Final”, “La Copa”). Pero los mundiales también son cinematográficos por su carácter alegórico, evocan un lugar y una época determinada, o quizás una infancia especialmente intensa y memorable (“El Milagro de Berna”, “1966”). Los invitamos a descubrir estas historias de fútbol en la pantalla grande.

Presentación y comentarios de Claudio Cordero.
Ingreso libre a todas las funciones.


MIÉRCOLES 9
7 p.m.


El Partido de sus Vidas
(Estados Unidos, 2005) 101 min.
Director:
David Anspaugh.
Actores:
Wes Bentley, Gerard Butler.

Sinopsis:
En la primavera de 1950, los Estados Unidos fueron invitados a jugar en el mundial de fútbol de Brasil. El problema es que apenas tenían presupuesto ni un equipo oficial, así que rápidamente reclutaron a unos jóvenes jugadores de St. Louis, Missouri, y les mandaron a Río de Janeiro a jugar contra los mejores equipos del planeta.
Auditorio de Pueblo Libre (Av. Bolivar 598)


MARTES 15
7 p.m.


El Milagro de Berna
(Alemania, 2003) 118 min.
Director:
Sonke Wortmann.
Actores:
Louis Klamroth, Peter Lohmeyer.

Sinopsis:
Verano de 1954. La Unión Soviética está enviando los prisioneros de guerra a casa. Entre ellos se encuentra Richard, el padre de Matthias, un chico de once años amante del fútbol. Para Richard, el fútbol no tiene ningún interés y menos la Copa del Mundo que está a punto de empezar en Berna, Suiza. A través de su pasión por el juego, Matthias vuelve a encender el amor por la vida en el corazón de su padre.
Auditorio de San Borja (Av. Javier Prado Este 2726)


JUEVES 17
7 p.m.


1966
(Inglaterra, 2006) 94 min.
Director:
Paul Weiland.
Actores:
Helena Bonham Carter, Eddie Marsan.

Sinopsis:
Ubicada en el verano de 1966, cuando Inglaterra se está consumiendo por la fiebre de la Copa Mundial. Bernie un niño de 12 años se está preparando para su Bar Mitzvah. Sin embargo, la familia de Bernie está cada vez más distraída por la amenaza de perder su negocio y a su caprichoso hijo mayor.
Auditorio de Surco (Av. Caminos del Inca 3551, esquina con Av. Tomás Marsano)


LUNES 21
7 p.m.


La Copa
(Bután, 1999) 93 min.
Director:
Khyentse Norbu.
Actores:
Orqyen Tobqyal, Neten Chokling.

Sinopsis:
Dos niños llegan a un monasterio al pie del Himalaya y se inician en la vida monástica. El misticismo se mezcla con una verdadera pasión por el fútbol; por las noches se escapan del templo-escuela para poder ver por la televisón los partidos del mundial de fútbol de Francia 98.
Auditorio de Jardines (Av. Alfredo Mendiola 1200, S.M.P.)


MIÉRCOLES 23
7 p.m.


La Gran Final
(España, 2006) 85 min.
Director:
Gerardo Oliveros.
Actores:
Zeinolda Iqiza, Shaq Humar Khan.

Sinopsis:
Una comedia que cuenta, a través de tres historias paralelas, las peripecias de unos hombres que tienen dos cosas en común: vivir en regiones remotas del planeta y estar empeñados en ver la final de la Copa del Mundo de Fútbol de 2002 entre Alemania y Brasil.
Auditorio de San Juan de Lurigancho (Av. Próceres de la Independencia 1527)